“Y quizás, al mirarnos o sentirnos, algo de ti también se active;
una sensación,
un paisaje olvidado,
una pregunta que aún no tiene respuesta.´´ Victor Lara
Huella Primitiva es un proyecto continuo, un diario visual abstracto construido a partir de viaje, exploración y encuentro. materia orgánica que se transforma en gesto pictórico. No busco representar, sino recordar.
Me guía la imagen del primer ser humano que apoyó su mano contra la roca y dijo, sin palabras: “estoy aquí” . Ese acto no fue arte: fue existencia. Fue un acto íntimo, sí, pero también el inicio de lo colectivo.
Mi historia personal también comienza con una huella: la primera mano que tomé al nacer, mi primer contacto con la naturaleza, y las huellas de todos los seres que me han marcado (mi perro, las manos que me criaron, mis amigxs, todos los lugares que he recorrido).
Estas pinturas no son representación del mundo, sino resonancia de mi vida. registros sensibles, del impacto externo en lo interno, cómo lo individual y lo colectivo se entrelazan en un mismo trazo, cómo el paisaje, el tiempo, el silencio, incluso el polvo, atraviesan el cuerpo y tocan lo humano
Es un retorno al gesto esencial, una memoria colectiva o íntima; el signo que no busca belleza, sino verdad. Una práctica que interroga desde lo visual y lo táctil, desde lo que se percibe pero no siempre se explica. Porque cada paso que damos deja algo.
Y quizás hoy, más que nunca, deberíamos preguntarnos:
¿Cómo habitamos el mundo?
¿Qué dejamos en los lugares, en los cuerpos, en los seres que tocamos?
¿Qué huella nos han dejado?
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